En estos 24 meses de vida de Mario voy descubriendo cosas de mí hasta ahora desconocidas, aspectos de mi carácter ocultos en mi subconsciente ya sea porque no quería sacarlos a modo de coraza autoprotectora, o simplemente porque estaban esperando el momento adecuado, la chispa que los activara. Y uno de estos momentos maravillosos ocurrió este lunes.
El lunes fui a buscarle a la escuela infantil (para la bruji este guiño ;) ), lo habitual es que vaya su madre, yo apenas he ido 3 o 4 veces en un año, y tenía ganas de saber como reaccionaría a este cambio, con un ligero miedo a que me preguntara por Rosa al verle. Así que entré en el edificio y allí estaba jugando con su amigo David, sonriente como casi siempre, se me caía la baba observándole mientras él no me veía, pero de pronto miró en mi dirección, se le iluminaron los ojos y corrió hacia mi, dándome un abrazo que no olvidaré jamás, le cogí entre mis brazos, apretadito a mi pecho y nos fundimos, él apoyando su cabecita en mi hombro y yo disfrutando de un momento único en mi vida. Apenas se movió en un buen rato, diciéndome a su modo que le encantaba que le recogiera y que me echaba de menos.
Fueron unos instantes mágicos, en los que pude experimentar el verdadero poder de un abrazo.
Cada dia desde entonces, cuando veo que el reloj marca las 16:00, no puedo dejar de pensar en ese abrazo que mi hijo me regaló y que hizo sentirme tan querido y necesitado, tanto que no dejo de emocionarme.
10 comentarios:
Snifffffffffffff
me enternece mogollon leer este post, ya lo he leido varias veces y joooooooo este transmite mucho, quiza porque hablas de nuestro hijo...
Es cierto el abrazo de un hijo no tiene precio, como tantas otras cosas en esto de la paternidad. Todo lo bueno es mejor de lo que esperamos, pero eso si, lo malo tb es mas duro de lo que te piensas a priori, aunque indudablemente merece la pena tan solo por uno de estos abrazos...
joder,joder,que cursis los dos.
Vale, tío, pero aprovéchalo antes de que crezca.
Cada momento en la vida es unico e irrepetible... Hay que estar abiertos y receptivos para captar esos momentos. El otro dia fue tu hijo, el que quiza te haya despertado mas esa atencion, ya que los niños no tienen condicionada "la patata" y abrazan y hacen sus acciones con todo el alma, pero seguro que a diario hay muchos gestos de semejante amor que ni percibimos... Abrazos, gestos, miradas, pensamientos....
Aprovecha lo que has recibido, y compartelo, no solo con tu hijo, o mujer... sino con el resto de seres que te rodean...
Tu hijo no solo te ha regalado un abrazo... Te ha dado una leccion de vida.
El amen se lo dejo a Jai, jajaja....
Pd. ¿porque no tenemos el mismo sentimiento que tenemos hacia nuestros hijos con los demas?
Kike el que sea unico e irrepetible no implica que sea para recordarlo o que te haga sentirte maravilloso. Unos mas y otros menos intentamos disfrutar de la vida cada uno a su modo, en mi caso compartiendo el mayor tiempo posible con mi familia y amigos y teniendo tiempo libre, otros les llena mas el trabajo a otros viajar....
En cuanto a los gestos que a diario s epueden ver, solo hay que estar atentos, pero dificilmente me llenará tanto como algo que vea en alguien cercano
En cuanto a la pregunta, la respuesta me parece bastante obvia, espero que nunca sienta lo mismo hacia mi hijo que hacia el que me mira el contador del agua.
Güicho, tienes razon, aunque espero que cuando tenga mas años también me dé otras cosas, muy distintas, pero otras...
ostias??????????'
Abundo en la aseveración de Güicho.Cuando crecen se transforman...como
hemos hecho todos...sólo que nos inunda el dsasosiego al pensar como este adolescente cabroncete fue en su día cariñoso y afable.
Con el que anota el gasto de agua,por lo normal no despierta esa suerte de sentimientos,con la que anota,quizas.
De todas formas si merece la pena compartir más con los hijos.es nuestro vehículo,en terminos genéticos,a la inmortalidad.
amén!!!!!!!!!!!
te has hecho de rogar jai.. jajaja
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